viernes, 22 de junio de 2012

Fin de curso

Hoy voy a confesar (al más puro estilo pantojil) que me aterrorizan los finales de curso, me da miedo romper con la rutina, me asusta preguntarme qué será de nosotros el año que viene. Contra qué molinos tendré que pelearme esta vez, reales o imaginarios, propios o ajenos... siempre hay algún gigante agazapado en forma de beca de NEE, de terapias, de rabietas, de profesores nuevos que no nos conocen... Este año ha sido sencillo, porque nos ha rodeado gente auténtica, de las que se han molestado en ocupar un ratito de su tiempo para conocer a mi Salva, a mi niño mágico, y entenderle.

Este curso que se ha cerrado hoy nos ha traído de la mano  a gente maravillosa, de las que enriquecen nuestras vidas: Alfonso, Anabel, Encarna, Estefanía, Lourdes... Intentar separarles por partes en nuestra trayectoria vital se me hace complicado, conforman un todo. Han sido el presente de un año donde los progresos que ellos han contribuido a alcanzar se mezclan con otros de base que previamente consiguieron las personas que estuvieron antes: Vanessa, Mari Carmen, Paqui...


Mi Salva expresa todo esto que siento ahora mismo mucho mejor que yo, porque él no necesita palabras, ni la seguridad que ofrece una pantalla en blanco para soltar un chorro de letras escritas que resuman, a duras penas, todo lo que quiero decir. A él le vale con mirarte, sonrisa en ristre, y decir "te quiero", y darte un beso y pedir perdón, dar las gracias o las "de nada" según se tercia.

Así que creo que hoy de forma muy excepcional puedo tomar prestada su carita y mostraros su felicidad que también es la mía. Y con ello siento aún más miedo, temo que los siguientes no os lleguen a la altura. Por todo eso y por mucho más, esta sonrisa también es vuestra, GRACIAS.



miércoles, 13 de junio de 2012

Futuro será...

Hace unos días personas a  las que considero de opinión puramente objetiva (y muy válida) me dijeron que yo debía ser una persona con una entereza mental muy fuerte. Lo llevo meditando desde entonces. Es verdad que a lo largo de todos estos años han intentado bajarnos a golpes de nuestro progreso lineal, nos han querido hacer creer que las cosas son mucho más complicadas de lo que de por sí son. Nunca lo he tomado como una ofensa, simplemente no les he creído. Y he seguido adelante, por el mismo camino.

Puede que hubiera caminos más rápidos, más caros y eficaces. Puede que sí, pero no considero que lo hayamos hecho mal. Simplemente hemos querido acoplar nuestra particularidad familiar a nuestra forma de ser. Lo que hacemos se ajusta a nosotros y además hace que nuestro hijo avance. Avances que veo, que todos vemos: saltar con los pies juntos, escribir su nombre, no necesitar pañal, expresarse, querernos... Yo no creo en la ameba que algunos se  empeñan en mostrarnos, creo en lo que veo. Y lo que veo es que detrás de cada paso hay muchos intentos de poner un pie delante del otro, pero al final los pasos se dan...

Algunas veces, alguien me ha dicho "yo no podría". Sí, TÚ sí podrías. Recuerda que las madres/padres de niños especiales  no somos diferentes, solo son las circunstancias las que nos hacen creer en lo que vemos. Yo he decidido ver futuro, ¿y tú?