lunes, 19 de noviembre de 2012

El universo es una fiesta

Pongamos que se conjugan los astros y de repente conquistamos el mundo. Tú serías el capitán de un ejército de herramientas hablanchinas y yo tu súbdita más fiel. O la mano derecha que organizara con férrea destreza la rebelión de tus auriculares. Saltaríamos de dos en dos los días de lluvia, hoy sí, hoy no... y solo saldríamos cuando ordenara su majestad. O sea, tú. Nadie nos impondría más rutina que la que dictase nuestro (propio)  sentido común y viviríamos en la parte del globo donde no hubiera una borrasca. Hoy Pernambuco, mañana Fernando Poo, ¿y pasado?, no sé, el Polo Norte... Tendríamos a todos los perros del mundo a nuestro servicio y le pediríamos a Eloy que los cuidara, que nos cuidara, que diera riendas a nuestra imaginación inventando canciones sin sentido, como solo él sabe. Nos reiríamos tanto...

Pero espera, espera... ya existe ese mundo. Es solo nuestro, está en el número 60 de una calle cualquiera. Solo que las más de las veces no es un paraíso perfecto, sino que es justo lo que muchos catalogarían como lo contrario. Y no lo cambio, ¿para qué? Imaginar mil formas de regañar a la lluvia no es algo al alcance de cualquiera, ni jugar con perros inexistentes, reconocer las herramientas por el color de su plástico o montar una fiesta porque hemos arreglado el termo del agua caliente.

De los mundos más complejos surgen las verdades más sencillas. Si te llevara la corriente, ¿dónde estaríamos hoy? No quiero saberlo, simplemente nos dejaremos hacer por el aparente caos de tu microuniverso. 

2 comentarios:

  1. ...no había visto ésto..... pero no hay otra canción que sea ésta (siento que tengas que buscar la traducción, es preciosa) http://www.youtube.com/watch?v=mECt7hdCHGg

    llumm

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  2. fascinada. lo comparto. con la venia.

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