Contadora de cuentos. Inventora de mentiras piadosas. Domadora de un ejército de piojos. Observadora de noches sin sueño y días sin probar bocado. Alumna en la academia de las bofetadas de la vida. Sostén de cabezas. Sargento en varios frentes. Pareja. Hija. Hermana. Amiga. Estudiante. Trabajadora. Transformadora de tacos en palabras: del moño, del miércoles, de la hija de la fruta. Escaladora de valles. Culminadora de cimas. Creyente a ratos.
Que me humea la frente en los días primos, de soledades que ya no vuelven. Ni para mí las quiero.
Electora sin fortuna. Afortunada de tener. Cantaora y cantarina. Bailaora que da el compás.
Inventé la vida tal y como me vino. Jugando lo que me quedaba aposté sobre seguro. Y gané: dos ases y un comodín.
Y desde entonces soy reina de un imperio enano. O profeta en mi casa, donde aletea por el techo mi alma.
Pero que no soy madre, no. Que yo solo doy saltos mortales sin red.
Que me humea la frente en los días primos, de soledades que ya no vuelven. Ni para mí las quiero.
Electora sin fortuna. Afortunada de tener. Cantaora y cantarina. Bailaora que da el compás.
Inventé la vida tal y como me vino. Jugando lo que me quedaba aposté sobre seguro. Y gané: dos ases y un comodín.
Y desde entonces soy reina de un imperio enano. O profeta en mi casa, donde aletea por el techo mi alma.
Pero que no soy madre, no. Que yo solo doy saltos mortales sin red.
me ha encantado
ResponderEliminarLOS CREYENTES, REZAN Y TIENEN RAZON PARA ELLO, ESA LUZ LES ILUMINA EL CAMINO.
ResponderEliminarOTROS TIENEN RAZONES PARA CREER,QUE LA LUZ DE UNA MIRADA INOCENTE, ES MUCHO MAS BRILLANTE.